Pinturas sobre papel amate

 

 

 

Escogí el papel amate, utilizado por los tlacuilos  (escribas-pintores y sabios aztecas) como soporte para expresar la experiencia del exilio. En esta serie pictórica he intentado, como ellos, representar la historia, pero en mi caso a partir del hecho de saberme extranjero.

 

Aunque este tema aparece ya en algunas de mis obras anteriores, es en esta serie que la metáfora de la escritura pintada adquiere toda su fuerza, gracias a las características tan particulares de este papel mexicano: sus vetas y sus tonalidades por sí mismas presentan una cualidad estética.

 

Todo exilio, sea voluntario o no, implica siempre una labor de reestructuración personal e identitaria. Por eso me gustaría que, quien contemple estas pinturas, encuentre en ellas un reflejo personal de esta experiencia de pertenencia y de abandono, de extrañeza y de novedad, pero sobre todo de asombro y de belleza que implican el hecho de ser extranjero... porque todos lo hemos sido alguna vez.